Si fuese perro, creo que también me cansaría de jugar siempre a recoger la pelota y haría como el perro del siguiente vídeo: buscar formas alternativas de diversión e innovar en mis actividades de ocio.
Todos hemos visto alguna vez la imagen de un perro sacando la cabeza por la ventanilla del coche, sintiendo el aire en su rostro mientras se le hinchan los carrillos. Por alguna razón, a los perros les encanta esta sensación y el bulldog del vídeo ha descubierto que puede sentir el aire en su cara sin necesidad de subir al coche. Mira cómo busca a su dueño para que ponga en marcha el soplador de hojas y el divertidísimo resultado de que el viento azote sus mofletes, ¡ni siquiera parece un perro!
Aclaración: el perro no sufre ningún tipo de daño por este tipo de actividad, totalmente inocua para su salud.
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