Una banda de moteros ayuda a recuperarse a los niños que han sufrido abusos

Las bandas de moteros crean expectación en cualquier parte del mundo, sobre todo cuando recorren las calles con sus estruendosas motos. Suelen dar una imagen de personas inquebrantables y temibles, pero en realidad se trata de un prejuicio más, como otros tantos que tenemos.

Hoy queremos presentaros a una banda de moteros que no sólo rompe con cualquier estereotipo marcado, sino que además cumplen una función fundamental en la sociedad y sirven de apoyo a muchos niños y adolescentes que pasan por el peor momento de su vida.

Esta organización, llamada B.A.C.A. de Biker Against Children Abuse (Moteros contra el abuso infantil), ofrece protección a todos los niños que sufren abusos sexuales, físicos o mentales. La organización no se dedica a impartir justicia por su cuenta, no dañan ni castigan a nadie, sólo se dedican a proteger a las víctimas.

Hacen guardia fuera de la casa de los niños, proporcionan escolta o simplemente se convierten en amigos. Tal y como ellos dicen, el abuso de niños es un problema que, lejos de desaparecer, sigue ocasionando muchas víctimas al año. Aunque esta protección no sea la solución definitiva, algo de lo que se tendrían que encargar los gobiernos, sí que aseguran que los niños que lo han pasado mal recuperen la confianza y dejen atrás el miedo.

Con la protección de estos moteros los niños se sienten mucho más seguros de sí mismos y, por ejemplo, no tienen miedo de declarar en un juicio inculpando, sea quien sea, al responsable. Tal y como podemos ver en este vídeo, estos moteros son como los superhéroes de la vida real.

Original: Carlos Whittaker