Su hija sufrió una agresión, la llevó al hospital y le dijeron algo que ha indignado al mundo entero
¿Cuántas veces hemos podido escuchar la frase "los que se pelean, se desean"? Peor, ¿cuántas veces la hemos creído? Por desgracia existe una creencia, más que equivocada, en torno al amor y el dolor físico que perjudica más de lo que pensamos. "Quien bien te quiere te hará llorar", no. No, nadie que te quisiera te haría llorar. Y no, nadie que te desee se pelearía contigo.
Esta triste historia ejemplifica cuán de contaminada está la sociedad al respecto. En Columbus, Ohio, una niña de cuatro años tuvo que ir al hospital después de que un chico de su clase la golpeara.
Merritt Smith, su madre, la llevó a urgencias para que le miraran su mejilla magullada. Mientras el personal sanitario se ocupaba de su pequeña, uno de ellos dijo una frase terrible. Merrit escuchó a un trabajador de la recepción decirle algo que la dejó sin palabras: "apuesto que le gustas". fue la frase del empleado del hospital de Columbus.
La declaración que hizo el hombre dejaba claro que es aceptable un modo de coqueteo hiriente. Indignada, la madre de la pequeña escribió en Facebook lo ocurrido para alertar de esta costumbre tan equivocada de creer que el amor es así.
"Mi hija de cuatro años sabe que así no es cómo le mostramos a alguien que nos gusta. Esa no fue una decisión correcta. En ese momento, en el que estaba herida y en un lugar nuevo, preocupada de que le suturaran, eras la persona que necesitábamos para que nos ayudara. Pero tus palabras de consuelo traían el mensaje equivocado. Quien te quiere puede hacerte daño, y eso no es para nada cierto".
No debería existir relación entre el amor y el dolor, entre el gustarse y pelearse. Esta forma de quitarle hierro al asunto es tan equivocada como inducir a la violencia física de este modo. Ni los padres del niño que agrede ni del agredido deberían bajo ningún concepto dar este enfoque.
Perpetua el dominio, la agresividad y la idea de poder hacer lo que queramos si alguien nos gusta. No, los que se pelean no se desean y quien bien te quiere no te hará llorar.
Fuente: gestionandohijos