Si eres un mago, te va a encantar tener a este bebé como público
La magia no tiene edades. Da igual que seas pequeño o grande, te va a encantar igual. Más todavía cuando el truco está bien hecho o cuando nos parece a nosotros que es una maravilla digna de admirar.
Quien sabe hacer un buen truco de magia tiene un punto extra. Es una herramienta más, para conquistar, para enamorar. Y quien cree en la magia, también tiene un punto extra; para disfrutar, para pensar y asombrarse.
Justo como este bebé que disfruta de la magia cien veces más que cualquiera.
El truco lo conocemos todos: hacer desaparecer algo. Lo mejor es la cara del bebé, no tiene precio ni desperdicio. Podrías pasarte el día entero haciendo este truco solo por ver una vez más la reacción del pequeño.
La inocencia y la frescura siempre le gustaron a la magia y este pequeño lo tiene todo. Qué gusto tener esa ilusión, no cansarse nunca del truco y disfrutar de todo como si fuera la primera vez. Ser un mago con este niño debe ser el mejor trabajo del mundo.
Fuente: Kyoot Kids