Los elefantes son animales realmente increíbles. Sus cualidades los hacen tan especiales que solo el hecho de observarlos es ya maravilloso. La historia de esta madre y su cría, te pondrá los pelos de punta.
En Tailandia, un joven elefante llamado Me-Bai fue secuestrado y separado de su madre cuando solo tenía tres años de edad. Por desgracia, como miles de elefantes cada día, son separados de su hábitat y sus familias para empezar a hacer de esclavos de los humanos.
Trabajan largas horas cargando todo tipo de turistas, son encarcelados y muchas veces mal alimentados. Una vida horrible que nadie desearía vivir. Por suerte esta historia tiene un final feliz.
Me-Bai, el pequeño elefante, fue llevado a otra parte del país y obligado a dar paseos a los turistas. Después de tres años y medio de trabajo duro, estaba demasiado débil para continuar; perdió peso y se deprimió

Mae Yui, su madre, también estaba siendo obligada a dar paseos a los turistas. Cuando el Elephant Nature Park rescató a Me-Bai y supo que su madre no estaba demasiado lejos, decidieron hablar con sus dueños para ver si la dejaban libre

Los propietarios de Mae Yui, de 30 años, aceptaron, y el Elephant Nature Park comenzó a planear una gran sorpresa para ambos elefantes. La madre y la hija, separadas desde hacía mucho tiempo, ahora tenían la oportunidad de reunirse

Cuando finalmente se reunieron no pudo ser más emocionante, los elefantes no olvidan ni dejan de querer. Se reconocieron y emocionaron igual que lo haríamos nosotros en una situación similar

Ahora la familia está felizmente junta y viven en libertad en la reserva natural de elefantes

Fuente: Honest to Paws


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