Los mejores remedios caseros para los cálculos renales

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¿Qué son los cálculos renales?

Los cálculos renales, médicamente llamados cálculos renales, son depósitos pequeños y duros que se forman dentro de los riñones, formados por minerales y sales ácidas. Las dimensiones pueden variar desde unos pocos milímetros de diámetro hasta el tamaño de una piedra pequeña.

Los cálculos renales pueden permanecer asintomáticos hasta que los cálculos renales comiencen a moverse dentro de los riñones o crucen la uretra, el canal que conecta la vejiga con los riñones.

También existe la posibilidad de eliminar cálculos renales sin síntomas obvios, cuando el cálculo es muy pequeño. De lo contrario, los cálculos renales viajan dan lugar a varios signos y síntomas específicos.

¿Estás interesado en prevenir los cálculos renales? A continuación, compartimos contigo una serie de remedios caseros altamente efectivos tanto para la prevención como para el tratamiento de los cálculos renales (también denominados como “litiasis renal”).

Mejores remedios caseros para los cálculos renales

  • Agua para prevenir cálculos renales. Cuanto mayor sea el volumen de agua consumida, mayor será la cantidad de orina excretada. Esto ayuda a reducir la cantidad de componentes que forman los cálculos renales. Por lo tanto, incluso puede beber 4 litros de agua al día, especialmente si previamente ha tenido un cálculo renal (para prevenir la recurrencia).
  • El magnesio se puede usar como un tratamiento natural mediante la introducción de alimentos que contienen magnesio en la dieta (esto ayuda a reducir la cantidad de oxalato en la orina, uno de los componentes principales de los cálculos renales).
  • La mayoría de las fuentes de magnesio son: pescado, arroz, aguacate y brócoli. Puede prevenir el desarrollo de cálculos renales al reducir el consumo de alimentos ricos en oxalatos, como: chocolate, nueces, frijoles, espinacas, uvas, fresas, arándanos y té negro.
  • Reducción de la ingesta de sal. Deben evitarse los alimentos con alto contenido de sal (sodio), que aumentan el nivel de calcio en la orina (lo que favorece las posibilidades de desarrollar cálculos renales). La ingesta diaria de sal debe limitarse a 2-3 gramos diarios. Es mejor evitar los alimentos ricos en sal: salsa de tomate, mostaza, bocadillos y salchichas.
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