Los elefantes africanos empiezan a nacer sin colmillos por culpa del ser humano
Es increíble hasta dónde llegan las consecuencias de nuestros actos. La ciencia ha demostrado que las especies evolucionan adaptándose a las condiciones de su medio con el fin de garantizar su supervivencia. Con el tiempo, se producen cambios genéticos que, de ser útiles, se van pasando de generación en generación hasta convertirse en un rasgo mayoritario.
Eso es precisamente lo que parece estar ocurriendo a varias poblaciones de elefantes africanos que, según los investigadores, han empezado a nacer sin colmillos debido a la caza.
Como sabréis, estos animales han sido masacrados desde hace cientos de años con el único fin de hacerse con sus preciadas piezas de marfil, un material de lujo que se utiliza mayoritariamente con fines decorativos.
Según demuestran las estadísticas actuales, en algunas áreas de África el 98% de las hembras no tienen colmillos, un dato muy distinto del 2-6% de elefantes sin colmillos que se registraron en décadas anteriores.
La realidad es que entre 2007 y 2014 se asesinó en torno a 144.000 elefantes, dejando a la especie al borde de la extinción en algunos territorios. Los investigadores creen que el hecho de que estén empezando a nacer sin colmillos es una adaptación evolutiva que busca garantizar su supervivencia, pues sin colmillos no habría razón para matarlos.
La portavoz de Elephant Voices, Joyce Poole, lleva 30 años estudiando el desarrollo de las especies y en un entrevista a The Times afirmó que existe una correlación directa entre el aumento de la caza y el del porcentaje de hembras que nacen sin colmillos.
El inicio de este cambio puede remontarse a la guerra civil de Mozambique que se produjo entre 1977 y 1992, un conflicto de 15 años durante el cual el 90% de los elefantes fueron masacrados. La doctora Poole cree que debido a esa caza desproporcionada, los animales empezaron a nacer sin colmillos y una vez que la caza empezó a estar controlada y se hizo posible la recuperación de la especie, el gen "sin colmillos" ha ido pasando de generación en generación.
Los investigadores, además, han descubierto que en comparación con los registros de hace un siglo, el tamaño de los colmillos de los elefantes ha disminuido considerablemente. Ambos cambios en la genética de la especie podrían estar protegiéndoles de los cazadores furtivos y garantizando su supervivencia.
Sin duda, esta noticia es un claro reflejo de cómo las actividades del ser humano pueden llegar a afectar a nuestros vecinos en el planeta. Si bien es cierto que la evolución está condicionada por muchos otros factores, no podemos negar que el ser humano se ha convertido en una de las principales causas de la extinción de muchas especies, y la naturaleza está haciendo todo lo que puede para evitarlo.
Sin embargo, que los elefantes estén empezando a nacer sin colmillos para garantizar su supervivencia no es una gran noticia pues, como podréis imaginar, estos enormes incisivos no están de adorno, sino que tienen una utilidad. Los animales los usan para excavar en busca de agua, para mover objetos pesados y como arma de defensa.
Fuente: Independent