
Aunque los gatos pueden ser un poco suyos a la hora de encariñarse con las personas, tienen un instinto protector muy desarrollado que puede emerger en los momentos más inesperados. Cualquiera podría pensar que ante la llegada de un bebé, un gato podría ponerse celoso o, sencillamente, asustarse y volververse más retraído; sin embargo, nada más lejos de la realidad.
Si tienes gato y esperas un bebé o si, por el contrario, tienes un bebé y estás pensando adoptar a un gatito, este vídeo va a ser el empujón definitivo. Mira esta preciosa recopilac
ión de gatos cuidando a bebés y verás como terminas de convencerte. ¿Quién necesita niñera?
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