El otro incendio del que poco se habla: murieron quemados 30 monos en el zoológico embrujado

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Uno de los temas que acaparan la atención de los grandes medios de comunicación en todo el planeta es la tragedia de los incendios en Australia. Hace meses que el fuego se devora millones y millones de hectáreas en el interior del país oceánico. Y las llamas también consumen la vida de los animales. Se calcula que después de la primera semana de enero ya murieron 500 millones de ejemplares de las más variadas especies. Por ocurrir en un país desarrollado, por la magnitud de las cifras, por las increíbles imágenes de pequeños koalas suplicando por agua a los seres humanos, los incendios en Australia se llevan todas las miradas desde hace varias semanas. Y por eso, casi pasó desapercibida otra tragedia para animales desatada por la imprudencia del hombre y la voracidad del fuego. En la noche de Año Nuevo, 30 monos y algunos otros animales murieron quemados por un incendio en la ciudad alemana de Krefeld, en lo que parece ser un zoológico embrujado.

Los 30 monos fallecieron al incendiarse un zoológico en Krefeld por el lanzamiento de globos de papel con fuego durante los festejos de Año Nuevo, informó la policía local.

El jefe de la policía criminal de Krefeld, Gerd Hoppmann, indicó que se encontraron cerca de la zona del incendio tres globos de papel de 34 centímetros de diámetro. Estos globos tenían mensajes en su interior, escritos a mano, que tenían deseos para el año 2020.

El incendio provocado por estos globos ocasionó la muerte de 30 animales en la jaula de los monos. Entre los ejemplares que fallecieron quemados hubo cinco orangutanes, dos gorilas y un chimpancé.

Tres mujeres, las principales sospechosas

Hoppmann agregó que varios testigos afirmaron haber visto en el aire, y a una altura muy baja, estos globos antes de desatarse el incendio. Este tipo de artículos cilíndricos, confeccionados de papel de seda, contienen una vela o una pasta combustible en su interior, que al producir calor hacen que se eleve.

El jefe policial recordó que desde 2009 están prohibidos estos globos de papel en el estado federado de Renania del Norte-Westfalia, donde ocurrió la tragedia, y en casi toda Alemania. La única región que todavía los permite es Mecklemburgo-Antepomerania. Esperamos que luego de esta lamentable tragedia esa situación cambie.

Horas después de este crimen contra la naturaleza (y contra animales que ya estaban en cautiverio) tres mujeres se presentaron ante las autoridades para reconocer su responsabilidad en la tragedia, que parece abonar la teoría que dice que el de Krefeld es un zoológico embrujado, ya que no es la primera vez que mueren animales por culpa de una tragedia bien humana.

Una madre de 60 años y sus dos hijas, que tienen alrededor de 30, son las principales sospechosas y están siendo investigadas por la justicia alemana.

Las tres mujeres acudieron a la policía después de que las autoridades hicieran un llamamiento para que se presentaran ante la ley los autores de los globos voladores.

El fiscal Jens Frobel informó a la prensa que las tres mujeres son investigadas por los cargos de “incendio intencional negligente”. Este delito esta tipificado en el código penal local con una pena de hasta cinco años de prisión.

Una tradición que se convirtió en tragedia

Es una costumbre de muchos alemanes darle la bienvenida al Año Nuevo con fuegos artificiales durante la medianoche del 31 de diciembre. Los globos voladores, sin embargo, son ilegales en Alemania.

Estas linternas voladoras son una especie de mini globos aerostáticos de papel, que son similares a los que tradicionalmente se utilizaron durante siglos en Asia.

Krefeld está denominada la “ciudad de seda” en Alemania. Justamente, en esta zona se desarrolló un intensivo comercio con finas sedas provenientes de China y del sudeste asiático desde finales del siglo XVII. La actividad comercial continuó hasta muy entrado el siglo XIX. Es por eso el apodo con el que se conoce a la ciudad. Y por eso, esta tradición asiática que, lamentablemente en este Año Nuevo, continuó practicándose.

La policía de Krefeld informó que las mujeres habían comprado cinco antorchas voladoras a través de Internet. Las tres declararon ante la justicia que no sabían que eran ilegales en Alemania. Y además se defendieron al sostener que nada en la descripción del producto indicaba que esos globos voladores estaban prohibidos en el país.

Hoppmann describió a las mujeres como "personas completamente normales que parecían muy sensatas, muy responsables''. El jefe dijo que habían tenido una actitud "muy valiente'' por reconocer su responsabilidad. Pero la leyenda del zoológico embrujado tiene su propio capítulo.

La historia de lo que parece ser un zoológico embrujado

El incendio en el zoológico desató la “solidaridad” de los pobladores de Krefeld. El director de la asociación de amigos del zoo, Friedrich Berleman, informó a la prensa local que más de cuatro mil personas se habían ofrecido para hacer donaciones al zoológico después del incendio.

Como la mayoría de los zoológicos que todavía existen, el de Krefeld nació con el concepto del siglo pasado, ya que se inauguró el 22 de mayo de 1938.

La idea era que fuese un lugar de educación juvenil en el Grotenburgpark, donde el área diseñada para el zoológico era la mitad del área total del parque.

La primera tragedia ocurrió durante la Segunda Guerra Mundial. No solamente porque sufrió bombardeos de las fuerzas aliadas, que mataron a varios animales. También quedaron dañadas las rejas de las jaulas, y entonces algunos animales pudieron escapar hacia su libertad.

Los lobos, desesperados y en busca de comida, comenzaron a merodear a las personas. La solución que encontraron las autoridades en ese momento fue la peor: asesinarlos.

Por eso, ya sea en 2020 o en la mitad del siglo pasado, cada vez que ocurre un problema inesperado en un zoológico, es muy probable que los animales terminen muriendo luego de haber llevado su vida tras las rejas como si fuesen delincuentes. Cuando en realidad, el delito lo cometen los seres humanos. Por eso, más allá de que pareciera un zoológico embrujado porque las tragedias se suceden contra los animales, en realidad es culpa de la ineptitud de las personas que ocurran estas tristísimos situaciones.

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