Un perro ciego y su perro lazarillo, grandes amigos

perros amigos

A menudo, las personas ciegas suelen llevar un perro lazarillo consigo, para que les ayude a desplazarse con menor dificultad por la calle e incluso que les ayude en las tareas cotidianas. Pero, ¿te imaginas a un animal que también tuviera a un compañero lazarillo? Pues sí, es más posible de lo que imaginas, y hoy te traemos la prueba.

Hoshi es un perro Esquimal Americano, que sufrió un grave glaucoma ocular cuando tenía 11 años. Por ello, tuvieron que extirparle los ojos y quedó ciego. Su dueña quería encontrar alguna solución para que Hoshi pudiera estar feliz de nuevo y que el hecho de quedarse invidente no le impidiera seguir teniendo una vida normal y plena. Por ello, decidió adoptar a un perrito abandonado llamado Zen y de raza pomeraniana, que encontraron en las calles de Washington.

Quién iba a imaginar entonces que al poco tiempo ambos perritos se harían inseparables, hasta tal punto que el pequeño Zen hace de guía para Hoshi. Tal es el cariño que se tienen que no se separan ni un momento, pasean y juegan juntos como los mejores amigos que son.

Su dueña quedó tan encantada con la buena relación de sus dos mascotas que quiso compartirla con el resto del mundo y creó una cuenta de Instagram llamada The flufly duo, en la que cuelga todas las instantáneas de esta entrañable pareja. Una muestra más del amor incondicional que sienten los perros por sus seres queridos. ¡Disfrútala!

Fuente: Vix Pop

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