Estamos llenando mares y océanos de basura
Esta ballena picuda llegó a vararse hasta tres veces a la costa noruega de Sorte. Una tras otra el pobre animal volvía a la costa y encallaba en aguas poco profundas. Después de rescatarla y liberarla la última vez, tristemente comprobaron que volvía después a vararse de nuevo. Fue entonces cuando empezaron a pensar más allá.
Sospechaban que debía estar enferma y agotada para no poder si quiera nadar. Las peores sospechas se confirmaron cuando después de fallecer los científicos abrieron el cuerpo de la ballena. La sorpresa es tan horrible como desagradable. Su estómago estaba lleno de basura. Encontraron alrededor de 30 bolsas de plástico, además de grandes trozos de materia plástica y otros muchos pequeños. Todo desperdicios humanos, basura que generamos y no reciclamos correctamente.
"Es increíblemente triste", dice uno de los científicos, el zoólogo y profesor Terje Lislevand de la Universidad de Bergen. Todo ese material extraído del cuerpo del cetáceo estaba causándole un mal enorme. Lislevand piensa que es precisamente por el plástico por lo que la ballena se comportaba de manera extraña y volvía una y otra vez a la costa. "El animal tenía tanto dolor que no era feliz", dicen los investigadores.
El plástico era como una gran bola en el estómago que lo llenaba casi por completo. Incluso puede ser que el plástico estuviera obstruyendo el sistema, explica el profesor y zoólogo.
Esta pobre ballena y tantas otras confunden el plástico que flota con calamares y otros animales que les sirven de comida. Pero lo peor es que el plástico no es solo un problema para las ballenas, sino también para las aves marinas y tortugas.
No hay palabras que puedan definir lo tremendamente triste que es que los humanos estemos llenando mares y océanos de basura. Hasta ocho toneladas de desperdicios tiramos cada año en el agua.
Y no solo eso, lo horrible que es que estemos matando a millones de especies únicamente por nuestro despreciable comportamiento con la naturaleza.
Fuente: Reddit