Lo que emerge de este río va a hacerte pensar en lo que le estamos haciendo a la naturaleza
A veces el reino animal se ve sacudido por desastres naturales o por barbaridades causadas por el hombre. Por desgracia, el Canal Shinnecock en Hampton Bays, Nueva York, ha sido recientemente el escenario de la muerte de miles de peces bunker. El agua apareció llena de miles de peces que permanecían muy juntos, hacinados, la mayoría de ellos flotando ya.
El hecho de permanecer como sardinas en lata tienen consecuencias horribles, porque desafortunadamente para los peces esto significa quedarse sin oxígeno e irremediablemente morir. Quien fue testigo de semejante masacre no sabía muy bien qué hacer, y menos todavía a qué se debía.
No es nunca plato de buen gusto encontrarse con escenas de sufrimiento o muerte. Sobre todo cuando a pesar de todo no podemos ya hacer nada, no podemos evitarlo o aliviar el dolor.
La explicación a estas imágenes la encontramos en el día anterior a la catástrofe. Mientras los peces estaban pasando por el canal, las puertas se cerraron causándoles la muerte cuando la marea cambió y quedaron atrapados.
El Departamento de Obras Públicas del Condado de Southhampton logró abrir el canal para liberar algunos peces, pero la mayoría no consiguió sobrevivir.
Barajan también la posibilidad de que apareciera un depredador mayor que los persiguiera para alimentarse y que los hizo huir hacia el canal justo antes de que este se bloqueara.
Las terribles imágenes de agonía son todo lo que ha quedado de este acontecimiento.
Fuente: Rodger Hubard