Descubre cuál es la última ciudad en prohibir los pit bulls, la medida más absurda jamás tomada
Los perros empezaron a dejar de ser animales salvajes cuando, hace más de 14.000 años, se acercaron al hombre para vivir junto a él. Se apuesta por esta teoría más que por la contraria (que el ser humano fuera adrede a domesticar al animal) porque siempre fue ventajoso para los cánidos vivir junto a las personas.
Para ellos, era más fácil alimentarse, obtener alimento y afecto o criar a sus cachorros sin tantos peligros, por ejemplo. Los perros, a su vez, proporcionaban protección al poblado y unas capacidades auditivas y olfativas que nunca tendremos los humanos; así que el triunfo de la relación estaba garantizado.
Con el paso de los años, los humanos hemos ido haciendo lo que nos ha venido en gana con los pobres animales.
Las últimas víctimas de nuestra perversión son los pit bull. Entrenados por el hombre para luchar en peleas, para debilitar reses o paras matar ratas como si fuese una competición, este animal es catalogado -también por el hombre- como potencialmente peligroso en casi todo el mundo.
La última hazaña de la estupidez humana ha tenido lugar en Quebec (Canadá), donde se ha prohibido que los perros de esta raza habiten en la ciudad.
La ciudad va a prohibir oficialmente los pit bull el primer día de enero de 2017. Pero esta medida no la hará única, solo la convertirá en una más de las ciudades que ya tienen esta norma, otras ciudades de América del Norte tienen leyes similares.
Si los propietarios de pit bull actuales no se deshacen de sus perros, esta nueva ley establece multas considerables para quien no lo cumpla.
Régis Labeaume, el alcalde de la ciudad, ha explicado que "incluso si un perro nunca ha mordido o no es peligroso, los dueños tienen igualmente 6 meses para deshacerse de él".
Los dueños de perros de esta raza han respondido masivamente y enfadados al comentario del alcalde. Ya son más de 13.000 respuestas, en su mayoría en contra.
En otras ciudades del país, como Ontario, las medidas contra estos animales no son tan estrictas. Se permite tener pit bulls aunque en público han de ir siempre atados y con bozal; además tienen que estar castrados.
Los protectores de animales aluden a la muerte de cientos de perros con buen comportamiento solo por la normativa que se quiere poner. Además, explican que el número total por mordeduras de perros no variará se elimine a esta raza o no.
Una de los sitios de anuncios de la ciudad, Kijiji, usaba el humor para hacer frente a la nueva ley. Proponía disfrazar a los perros pit bull de caniches, conejos u otras cosas para que no fueran reconocidos.
No sé vosotros, pero en La Nube de Algodón tenemos claro que las acciones de un perro están ligadas a su educación y a su calidad de vida, no a su raza.
Fuente: The Dodo